Receta para escribir una novela
Ya he visto miles de blogs hablando de como escribir una
novela: la mayoría de puntos se repiten y apenas cuentan nada que no sepamos. Por
ello he decidido apuntar aquí un breve resumen como entrante y, cómo no lo puedo
evitar, tengo que hacer bromas del todo a cien para sentirme a gusto.
Ingredientes:
—Una idea; si son más deja de perder el tiempo aquí y
empieza a escribir o te dan las uvas.
—Una trama; recuerda que debe tener subtramas entrelazadas para
aumentar su sabor y suavizar su textura. En caso contrario tendrás una masa
seca y de textura rugosa que te asesinará probablemente mientras duermes.
—Los personajes; hay de toda clase: protagonistas,
secundarios, terciarios, antagonistas y los que odias a muerte pese a que no
existen como Jar Jar Binks.
Dicen que hay miradas que matan, luego está la de este personaje. |
—El narrador; necesitas por lo menos uno que te relate la
vida y privacidad de los personajes desde su visión omnipotente (Facebook no
cuenta). A veces los mismos personajes pueden
reunirse y contarte cada uno su punto de vista y, con ello, dejando en paro al narrador
omnisciente. En otras ocasiones un único personaje se enamora de su propia voz y
nos describe su vida en detalle, mientras el narrador omnisciente se preocupa
de buscar trabajo en el Telepizza.
—Un mundo; es el lugar idóneo para poner todos los ingredientes
y expandirlos. No es recomendable meterlo en el microondas, calentar 1 minuto y
servir porque adquiere un sabor amargo y una sensación a tierra al masticarlo
que no es agradable. Este ingrediente requiere de fuego lento.
☆゜・。。・゜゜・。。・゜★
Pasos a seguir:
1. 1. Recoge una idea fresca y la exprimes hasta que
su carne esté más seca que mi cuenta corriente.
2. 2. A continuación, limpia la trama con un cuchillo
y separa las hebras de subtramas para trabajar mejor con ellas. Más tarde se volverán
a rejuntar, no debes preocuparte; no son los Beatles. En este paso se añade el
zumo de idea para que cuaje bien.
3. 3. Adereza la trama con los personajes. Evita echar
demasiados porque puede quedar un sabor muy intenso y a la hora de catarlo no
se diferencian los matices. Pero no seas tacaño tampoco que te puede quedar
crudo si no lo cocinas en su punto.
4. 4. Amasa el mundo con los personajes, la trama y
las subtramas hasta que quede homogéneo. Y termina envolviéndolo con el
narrador.
5. 5. La masa resultante la introduces en el horno a
unos 220 °C durante 2 años. El tiempo de horneado puede variar según la
potencia de tu horno.
6. 6. Finalmente, una vez dorado, es hora de servirlo. La decoración es muy importante porque una buena imagen puede ocultar una terrible ejecución...
Si eres escritor esta receta emocionará a los lectores y los trasportará a su infancia cuando sus madres les preparaban Ratatouille. Un momento, eso me suena de algo.